DIARIO DE....

CAPITULO 1

El ritual mañanero

 

 

       Me levanto de repente, como siempre, abro los ojos y ya estoy de pié. Me visto sin hacer mucho ruido, bajo con cuidado, voy al baño, preparo café, enciendo el ordenador. Mientras me fumo un cigarro en el patio escucho cinco campanadas, pienso en el día que me espera e intento visualizarlo, la furgoneta que me toca hoy, si llegará la carga a su hora, las cantidades que tendré que preparar, el chiste que voy a contarle a mis compañeros, la canción que se me mete todos los días en la cabeza, hoy es Breaking the law de los Judas... termina de subir el café, entro en la cocina y busco una taza, la lleno por la mitad y dejo para dos veces más, por la tarde cuando llegue daré buena cuenta de él, dos cucharadas y remuevo lentamente para no armar mucho escándalo, me da mucho coraje cuando escucho remover un café exageradamente, no le echo leche nunca, me gusta solo, miro el reloj, tengo un cuarto de hora antes de salir, me tomo los sorbos poco a poco y le echo un vistazo a mi muro de Facebook, le doy unas cuantas veces al me gusta, pongo un par de vídeos heavy, hoy Avenged Sevenfold y Gary Moore que hace un año que murió, pongo algunas fotos y comento algunas chorradas de mis amigos, me quedan cinco minutos para ir otra vez al baño, ahora para hacer algo más que mear, cuando termino me lavo las manos y la cara, no me peino porque me estoy rapando la cabeza desde hace ya unos cuantos años, subo a despedir con un beso a mi mujer y mis dos hijos, ellos no se enteran pero me voy tranquilo, pienso aunque sin quererlo que si me pasa algo, por lo menos les he podido besar por última vez, bajo de nuevo y preparo mi bolsito, cartera con carnet, tarjeta de gasoil, cinco euros para tabaco y café o una copita de anís, en invierno hace frío y apetece, me pongo el chaquetón, cojo las llaves, le doy un par de toques en la cabeza a nuestro perro y salgo por la puerta. Son las 5.30 y es la única certeza que tengo en éste trabajo, la hora de llegada nunca se sabe......